Quizás en mis primeras impresiones hable algo negativo del juego, pero algo que me ha gustado son las peleas con los jefes. Los jefes tienen algo de reto y pueden llegar a asustar con los porrazos que dan, no son difíciles si uno sabe administrar recursos pero me dan la sensación que que existe la posibilidad de perder en el juego.
Como había mencionado en mis primeras impresiones, el sistema de batallas es el de un JRPG por turnos en donde tu solo tiene control sobre tu personaje, pero tienes otros mecanismos para administrar que llamaremos saleros y el santuario. Los saleros contienen sal que permiten hacer distintas cosas, como recuperar salud y mana, sus usos son limitados pero pueden ayudar a acelerar las peleas o ganar algo de tiempo en situaciones apretadas. El santuario es una posición "fuera de juego" en las que se puede poner un Mii durante la batalla, en esta posición el Mii no podrá atacar o ser atacado, pero puede recuperar un poco de su salud y mana o de maldiciones. La desventaja de dejar al personaje ahí es que pierdes el turno del personaje si le das tiempo de recuperarse y aumentas la probabilidad de que los enemigos se enfoquen en un personaje débil. La administración de estas mecánicas junto con las cosas extrañas que pasan con cada jefe hace que la experiencia, a pesar de ser repetitiva, sea deleitable.
Eso si, sigo detestando un poco las reglas de equipar y ya solamente recurro a cambiar su apariencia cuando se siente muy fuera de lugar. Ya también me hice a la idea de que al final de cada campaña el malo del juego me va secuestrar a mis Miis y me va bloquear la profesión que tenía, pero bueno, con cada nueva iteración se desbloquean nuevos trabajos... lastimosamente la gran mayoría por fuera de lo clásico de un juego de rol... para decirles que hay una profesión que es ser flor... que se traduciría algo así a ser un Shaman.
Y bueno, de ladrón a caballero y de caballero a científico, ya tengo definido la clase de dos de mis compañeros y aún esto decidiendo por el tercero. Quien sabe que pendejadas me prepara el juego en su tercera campaña, pero digamos que el juego me esta dando lo que prometío en el demo, que pudo estar mejor, si. Que pudo ser más complejo con relación al precio, si. Lo importante es que se disfrute y no se deje abandonado como me ha pasado con otros títulos.
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